Eduard Punset: una de las voces más carismáticas de la divulgación científica
Escritor, jurista, economista, ministro durante la Transición y los primeros años de la democracia, comunicador, presentador…Todas estas facetas definen a Eduard Punset, pero, sobre todo, será recordado por ser una de las caras más visibles de la divulgación científica en español. Esta mañana, la noticia destacada era su muerte, a los 82 años, tras padecer una larga enfermedad, según ha comunicado su familia a través de un comunicado en redes sociales.
A lo largo de su vida, Punset dedicó su talento y energía a la divulgación científica y a compartir ideas y conocimientos con el objetivo de acercar la ciencia a los ciudadanos, especialmente, a través del programa Redes, emitido en la 2 de TVE, donde fue capaz de explicar la ciencia con rigor, pasión y con un toque irónico, logrando generar interés entre todo tipo de público.
En las más de 600 emisiones de este programa de divulgación científica, entrevistó a grandes científicos, como los cosmólogos Lawrence Krayss, Leonard Susskind y Max Tegmark, los biólogos Richard Dawkins o Lynn Margulis, y al etólogo Frans Waal preguntándoles sobre el origen del Universo y la vida, la evolución biológica, la naturaleza humana y animal o el destino de la Tierra y el cosmos.
En Duomo Comunicación nos quedamos con una de sus tantas frases: “Si la vida fuera eterna no pondríamos en ella la misma intensidad”. Frase conocida y repetida por muchos, y que hoy refleja a la perfección la insaciable curiosidad, el eterno optimismo y la pasión por la ciencia que ha caracterizado a Punset a lo largo de su vida.
Vinculación a medios de comunicación
Punset, además de ser uno de los divulgadores científicos más conocidos del país, fue autor de más de una treintena de libros y durante toda su vida estuvo estrechamente vinculado a los medios de comunicación. Se licenció en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, y empezó su carrera profesional como redactor en la BBC tras cursar un máster en Ciencias Económicas en la Universidad de Londres. También fue director económico en América Latina en The Economist, y en enero de 1996 inauguró en La 2 de TVE el programa Redes, que presentó y dirigió entre 1996y 2014, cuando dejó de emitirse.
Divulgación científica en televisión
A pesar de que el modelo de Redes logró entrevistar a premios Nobel y trató densos temas, generando interés y conocimiento en la población, todavía son pocos los programas televisivos dedicados a la divulgación científica en televisión. La cadena pública ha sido, tradicionalmente, la más proclive a la divulgación científica, especialmente en su segundo canal; en la actualidad, El cazador de cerebros –que vincula la ciencia a la economía, la creatividad y la sociedad– y Órbita Laika son dos de los programas de divulgación más populares de la cadena.
Por otra parte, en las cadenas privadas, la ciencia está presente en programas como El Hormiguero, que cuenta con un microespacio dedicado a experimentos que logran emocionar a los espectadores entre bailes, famosos, tertulias y entrevistas. Además, uno de los grupos televisivos internacionales con una mayor tradición científica es Discovery, que en el canal abierto de la cadena en España (Discovery MAX), hizo una gran apuesta por la emisión de ADN Max. En este programa se analizaban descubrimientos científicos y novedades tecnológicas, demostrando a fuerza de ingenio e innovación que la ciencia puede ser divertida y apasionante. Dejó de emitirse en 2016.
En este sentido, la opción de darle a la ciencia pequeñas secciones dentro de otros programas, como magazines o informativos generalistas contribuirían a que el consumidor, independientemente de su edad, se habituara a estos contenidos, se familiarizara y se interesara por el conocimiento científico y la divulgación.
Hoy no solo se han hecho eco de la noticia los medios de comunicación, sino también muchos ciudadanos en redes sociales, convirtiendo a Eduard Punset en Trending Toppic a través de incontables mensajes de admiración hacia el divulgador, y también de agradecimiento, por su dedicación al enseñarnos todo lo que sabía y aprendía, y por hacer sencillo lo complejo para promover el conocimiento de la ciencia entre la sociedad.